lunes, 25 de noviembre de 2013




Yo nací anoche, cuando le conocí a usted. No tengo pasado, sólo futuro.

Gilda (1946) - Charles Vidor


Creo que ha pasado tiempo desde que no escribía ninguna historia.

Creo que todo empezó con una niña con un vestido de cuadros verdes y rosas, con el pelo color rayos de sol de verano, hace casi 2 años.

Creo que es bueno no dejar de creer.

Creo que fue un homenaje a aquel glorioso 'si fuera un rancho me llamarían tierra de nadie' que soltó Rita Hayworth en Gilda con aquellos aires de femme fatale mientras se hacía la vencida. Creo que a veces merece la pena dejarse vencer.

Creo que tempus fugit.

Creo que, en cierta ocasión, un tipo muy sabio dijo que si quieres conocer a una persona, no le preguntes nunca lo que piensa, sino lo que ama.

Creo que esto es en lo que creo. Y en lo que no.

Creo que esto es lo que soy.


No creo en los aniversarios. No creo en los que tienen vocación de plañidera. No creo en los que siempre dicen que están bien. No creo en los 'te lo dije'. No creo en montar las cosas sin mirar las instrucciones y que siempre sobre un tornillo. No creo en el carpe diem. No creo en los límites que nos ponemos nosotros mismos.

No creo en la gente que da dos besos cada vez que te ve. No creo en el karma. No creo en el reggaeton como método de ligue. No creo en lo políticamente correcto. No creo en Carlos Ruiz Zafón. No creo en los hombres que se depilan ni en las mujeres que van siempre perfectas. No creo en las omnipresentes modas culinarias que 'reducen' casi cualquier cosa para dar caché a un plato. No creo en el esnobismo lingüistico basado en anglicismos. No creo en el horóscopo. No creo en el photoshop. No creo en los puntos de inflexión. No creo en los que son antipáticos y bordes para parecer interesantes. No creo en la silicona. No creo en aquellos que escriben sin tilde su propio nombre.

No creo en la carne muy hecha. No creo que haya un sonido más insoportable que el claxon de los coches. No creo en Lost. No creo en los que se comunican mediante gritos para hacer valer sus ideas. No creo en los que miran el movil en el cine. No creo en los que mantienen las distancias para evitar que les hagan daño. No creo en ninguna de las 50 sombras de Grey. No creo en los que se esconden detrás de un ordenador por no dar la cara. No creo en las camisetas ajustadas. No creo en los sitios en los que 'está todo el mundo'. No creo en las felicitaciones por Facebook.



Creo que es mejor pedir perdón que permiso. Creo que Jim Morrison sigue vivo. Creo en el lado frío de la almohada. Creo que echar mayonesa a una buena tortilla es una blasfemia. Creo que quien no arriesga no gana. Creo que no ganar es un eufemismo de perder. Creo en el libro de papel. Creo que el pescado está infravalorado. Creo en el sonido de un tocadiscos. Creo que la vida es demasiado corta como para leer libros aburridos. Creo en El cazador del desierto. Creo que lo importante no es caer, sino aterrizar. Creo en Instagram. Creo en las viñetas de Mafalda. Creo en las croquetas de mi madre, aunque nunca le queden igual de una vez para otra. Creo que es mejor ir a un concierto solo que mal acompñado. Creo que hay muchas formas de vivir la vida, y las más locas no siempre son las más intensas.


Creo en Barney y Robin. Creo que las plataformas son un atentado estético que habría que erradicar. Creo en el humor negro, ácido y políticamente incorrecto. Creo en los que hacen castillos en el aire y sueñan despiertos. Creo que la hora del desayuno es sagrada. Creo que no hay mayor golpe directo que el olor de una mujer. Creo más en lo salado que en lo dulce. Creo en las tostadas con mermelada de fresa y en la leche con cola cao para desayunar. Creo que cuanto más deseamos algo más nos alejamos de ello por miedo a conseguirlo. Creo en las camisas de cuadros y las faldas cortas. Creo que Bruce Willis nunca debería jubilarse. Creo en los viajes en tren. Creo que me sé diálogos de memoria de Aladdin. Creo que esto no puede ser muy normal. Creo en las patatas del Foster's Hollywood. Creo en los que se lanzan a la piscina sin mirar la profundidad. Creo que 'dejarse llevar suena demasiado bien' como decía Vetusta Morla.

Creo en las cenas alrededor de una mesa redonda. Creo que un hombre nunca puede ocultar cuando está borracho o enamorado. Creo que es lo que les hace encantadores. Creo en las camisas de once varas. Creo en la música como forma de vida. Creo que nunca se tienen suficientes zapatos. Creo en el slow food. Creo en el slow-lo-que-sea. Creo en el roce de la piel desnuda para dormir. Creo que un hombre siempre estará sexy con unos vaqueros y una camiseta blanca. Creo que lo importante no es el dónde ni el cómo, sino con quién. Creo en Jack Nicholson en Mejor Imposible.


Creo que la bisagra que chirría es a la que acaban echando aceite. Creo en John McClane. Creo que nunca aprenderé a escribirlo bien. Creo que cada uno hacemos nuestra propia suerte. Creo que el vino que mejor sabe es el que se bebe directamente de la botella. Creo en las jodidas historias de amor y en las historias de amor jodidas.

Creo que nuestras vidas son cartas de una baraja rota.

Creo que 'Summertime sadness' de Lana del Rey es la canción perfecta.


Creo que lo mejor está por llegar.

Y creo en Gilda, por supuesto.

Creo que sigo creyendo. Creo que sigo creyendo en que nunca dejamos de creer.



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